"No tiene sentido pelear ni de nuestro lado ni del de ellos.
Teníamos todo el momentum; navegábamos cresta de una inmensa y bellísima ola.
Y ahora, menos de cinco años después, puedes ir hasta la cumbre de alguna colina en Las Vegas
y mirar al Oeste.
Y con la mirada apropiada, casi podrás ver el lugar donde finalmente la ola rompió contra la tierra
y comenzó a retroceder".